El
26 de Mayo de 1913 nació en Surrey, Inglaterra, Peter
Wilson Cushing, uno de los grandes caballeros de la historia
del cine.
Desde niño tuvo inquietudes
artísticas, especialmente un gran interés por
la interpretación. No fue especialmente animado por
sus padres, que incluso tenían un pariente cercano
actor del que se avergonzaban. Así pues, Peter estudió
para ser agrimensor, al igual que su padre, pero tras un breve
trabajo como empleado, ganó una beca para estudiar
en la Guildhall School of Music and Drama.
Pronto comenzó a hacer tablas
sobre el escenario, totalmente enganchado a la interpretación
desde la primera vez.
Decidido a convertirse en una estrella
del cine, con 26 años Peter Cushing viajó a
los Estados Unidos donde siguió haciendo teatro en
Broadway y comenzó a interpretar pequeños papeles
en películas como "La máscara de hierro"
o "Estudiantes en Oxford" de Abbot y Costello.
Con la 2ª Guerra Mundial Cushing
regresó a su tierra natal, para unirse al ejército.
Afortunadamente una antigua lesión le incapacitaba
para unirse a las filas del ejército, por lo que se
inscribió en la Asociación de Entretenimiento
del Servicio Nacional, pudiendo así actuar para animar
a las tropas.
En ese periodo conoció a Helen
Beck, quien se convertiría en su esposa hasta su fallecimiento
en 1971. Fue de ella de quien estuvo profundamente enamorado
toda su vida y quien le animó a presentarse al casting
de la adaptación de Hamlet que estaba preparando Laurence
Olivier.
Solo consiguió el único
papel que todavía no estaba asignado, el de Osric.
Pero Peter Cushing pasó a formar parte de su compañía
de teatro, en cuya versión de la obra "Proposal"
logró uno de sus mayores triunfos.
Con una magistral interpretación
del papel principal tuvo incluso que salir abrumado a saludar
por los aplausos tras la bajada del telón ¡hasta
ocho veces! También fue Helen quien le aconsejó
trabajar en televisión, en un período en que
Cushing sufría una fuerte depresión por falta
de papeles.
En ese medio, Peter consiguío
papeles protagonistas y popularidad instantánea.
Especialmente importante fue su interpretación
en 1954 de Winston Smith en la versión de "1984"
de la BBC. Ese papel le valió el premio al mejor actor
de la Asociación de la Televisión británica,
pero también le descubrió ante la productora
Hammer, cuyos films marcaron un antes y un después
en el cine de terror europeo.
En 1957, la primera aparición
de Peter Cushing fue como Barón Frankenstein en la
película "La maldición de Frankenstein",
papel que retomaría en cinco ocasiones.
Su memorable interpretación
del científico loco -el verdadero monstruo- tuvo un
gran impacto en el público, que sin embargo no encasilló
al actor como villano, debido a la convicción con que
interpretaba Cushing a personajes bien distintos.
Poco después se nos mostraba
como el heróico cazavampiros Van Helsing en "Drácula",
y como Sherlock Holmes en "El perro de los Baskerville".
Sus impresionantes trabajos establecieron
una gran influencia no sólo en el cine de terror en
general, sino también en esos papeles en particular.
Como declaró el director John Carpenter: "Peter
Cushing se convirtió en un icono de quienes han de
ser Frankenstein y Van Helsing. Y sin dejar de ser nunca el
afable caballero inglés, amante de los dibujos animados
de la Warner Bros."
Peter Cushing alternó sus papeles
terroríficos con otros muy distintos para diversificar
su trabajo, pero siempre volvía, aun siendo malas películas,
para satisfacer a sus admiradores.
Solía decir: "¿Quién
quiere verme como Hamlet? Muy pocos. Pero millones de personas
quieren verme como el Barón Frankenstein, entonces
ese es el que hago."
Cushing era muy apreciado tanto por
la crítica como por el público por su interpretación
corporal, por su suave voz de perfecto acento londinense,
e incluso por la utilización gestual de objetos como
plumas o pipas.
Fue idea suya en "Drácula"
en lugar de utilizar el enésimo crucifijo habitual,
saltar sobre una mesa, coger dos candelabros y entrecruzarlos
formando una cruz.
De todos modos, el secreto de sus interpretaciones
consistía en algo bien sencillo: "Yo
creo en los personajes que represento y en los extraños
y extraordinarios líos que organizan. Tengo que creer
que es el único modo en el que evito que se rían
de mí y de mis películas al salir del cine."
En 1971 murió de enfisema Helen,
lo que supuso un devastador golpe para el actor.
"Siempre he dicho que nací en 1913, empecé
a vivir en 1941 cuando conocí a Helen, y morí
en 1971 cuando ella falleció" decía
Peter Cushing.
Cushing lograba seguir adelante a
duras penas únicamente porque sabía que al final
volvería a reunirse con su esposa.
Se volcó en el trabajo para
tratar de superar su situación llegando a rodar doce
películas en los doce meses siguientes. Entre ellas,
a modo de homenaje a Helen, interpretó en "Condenados
de ultratumba" a un hombre absolutamente destrozado por
la muerte de su esposa.
En 1976, George Lucas se reunió
con él para proponerle el papel de Obi-Wan Kenobi,
pero en cuanto le conoció, supo que había encontrado
al Gobernador Tarkin.
"Francamente habría sido
más bonito interpretar a Kenobi, pero de hecho no tuve
elección. Estaba haciendo otra película a la
vez, e iban a surgir problemas con el programa de rodaje de
'Star Wars'. Al final todo funcionó, ya que el papel
de Tarkin requería menos tiempo de rodaje que el de
Kenobi", dijo el actor.
El carácter siempre amable,
generoso y humilde para con todo el mundo es legendario. Carrie
Fisher comentó: "Me caía
tan bien Peter Cushing que me resultaba casi imposible sentir
el odio que necesitaba al actuar frente a él".
Y el actor Don Henderson (General
Tagge), que también coincidió con él
en el film "The ghoul", decía:
"Mis recuerdos de trabajar con Peter son que él
era un hombre de un gran encanto, muy educado, todo un caballero
y un profesional al 100%. Nunca le oí jurar, ser descortés
con alguien, molestar a alguien, ni siquiera decir algo malo
sobre cualquier persona, pasase lo que pasase".
Fue precisamente por su papel como
el Dr. Lawrence en "The ghoul" por el que consiguió
su primer premio como mejor actor en el Festival Internacional
de Cine de ciencia-ficción y terror de Sitges. El segundo
fue en 1983, por "La casa de las sombras".
Peter Cushing quedó extasiado
con el resultado final de "La guerra de las galaxias".
Lo único que lamentaba, decía, era que el pobre
Tarkin al final saltaba por los aires, lo que implicaba que
no podría aparecer en las secuelas.
En los años 80's fue reduciendo
su trabajo como actor tras serle diagnosticado un cancer,
aunque aprovechó su retiro para escribir una autobiografía
en dos volúmenes (uno de ellos monográfico sobre
su trabajo en la Hammer), para recaudar fondos para la investigación
sobre la enfermedad que padecía, y disfrutar con la
lectura de la observación de pájaros y la pintura.
En este último aspecto cabe
destacar la publicación en los años 90's de
los libros "Peter Cushing's Tudor Tea Room Profiles",
recopilación de caricaturas dibujadas por el actor,
y "The Bois Saga", cuento de fantasía escrito
e ilustrado por él.
En 1988, la Reina Isabel II le otorgó
la Orden del Imperio Británico "por su contribución
al entretenimiento internacional", galardón del
que siempre se mostró muy orgulloso.
Peter Cushing falleció víctima
del cancer el 11 de agosto de 1994 en Canterbury (Inglaterra),
pero como dijo George Lucas: "Creo
que será recordado con cariño durante los próximos
350 años, como mínimo." |